viernes, 12 de abril de 2013

El entreno de Murphy y nuevo juego de llaves para la Vespa


Como bien saben los que me conocen o me siguen (sobre todo en twitter), hace 3 semanas volví a correr o mejor dicho a trotar/entrenar.
Las cosas parece que siguen bien, sigo teniendo fascitis ya que todas las mañana si no estiro los pies unos 5 minutos antes de salir de la cama me toca ir de puntillas a la cocina, pero ningún aviso de peligro de parte del espolón así que imagino que la fascia no está tan inflamada como hace 5 meses.
Voy sumando kms, chino-chano, aunque el  otro día me atreví con cambios de ritmo de 500m y un par me salieron más rápidos de lo que hubiera podido imaginar (Cambios de ritmo)
Así que hoy, con el buen día que hacía y siendo viernes (salgo del curro a las 15.30), quería aprovechar de las pistas que siguen en Delta del río Llobregat para meter algún km más entre pecho y espalda. No tenía nada planeado pero pensaba en rodar por lo menos 10K.
Único problema, que al ir con la Vespa tenía complicado guardar la ropa para conducir hasta allí y abrigarme tras el entreno. Para que no se me ocurrieran excusas para saltarme el entreno , nada más llegar a casa vaciaba la guantera sacando traje de lluvia, herramientas, bote de espuma para pinchazos y todo lo que consigo acumular en aquel espacio tan reducido. Mientras me llevaba todo en el ascensor pensaba: total, si he hecho más de 7000 km en estos últimos 2 años, ¿voy a pinchar justo hoy que no llevo herramientas para cambiar el neumático?
Ya en casa me preparo, bidón con agua, un gel (que me he comido mis 200g de pasta, pero era la 1 y ahora ya casi son las 5), ropa seca para después del entreno y mini cinturón/riñonera para las llaves de la Vespa/carnet de conducir/tarjeta banco por si las moscas y a por El Prat.
Estoy a cerca de medio km del sitio donde solemos aparcar cuando, intentando adelantar un tío que buscaba aparcamiento para el coche, se me va la Vespa, empezando a dar bandazos difíciles de controlar . En unos 20 m consigo parar – no sin descargas de adrenalina a tope – y constato que sí: HOY TOCABA PINCHAR! Y vaya pinchazo, un corte de 3 cm en el neumático … y como la vespa es de las de verdad (con marchas, chassis  y elementos portantes de metal, y, ahimé, neumáticos con cámara de aire) me encuentro en la cuneta. Lo bueno de las Vespa es que tienen neumático de repuesto pero … las herramientas están a buen recaudo en nuestro piso L
Empujo la Vespa hasta la acera más cercana justo mientras empieza a levantarse un aire en ráfagas muy molestas. Es bastante pronto así que decido aparcar lo scooter en una acera, quitarme la cazadora, tomarme el gel e ir a entrenar. De la Vespa me ocuparé luego, ahora a correr.
El sol se ha tapado algo, y con pantalón corto y camiseta de manga corta noto algo de fresquito pero sé que luego me sobrarían más capas así que sigo. Pero es cierto que con este airete me entra casi enseguida necesidad de hacer un pis. Sé que a poco más de un km de allí, a lo largo del recorrido que quiero hacer, hay lavabos públicos así que a buen ritmillo empiezo a correr. Llego a la deseada caseta, la señal dice que está libre así que abro la puerta y, como gatos en celo que no resisten a las llamadas de las hormonas, pillo a una pareja apareándose, y encima sin cerrar la puerta!!!! Madre mía! Salen al minuto, pidiendo disculpa pero tampoco muy avergonzados. Flipo! Pero finalmente tengo mi lavabo, cierro la puerta y salgo casi como nueva! 
Sigo con el calentamiento, que como siempre me sale más rápido de lo que tendría que ser. Me meto por el camino que lleva al mirador del Delta del Llobregat ya que la gente en general en esta temporada prefiere ir hacia las playas y por aquí hay menos ajetreo.


Tras 3 kms de calentamiento decido hacer algo progresivo aunque el cuerpo todavía no pueda lanzarse a velocidades de otro mundo.  Así que empiezo con 3 kms alrededor de los 5’-5’10”/km para luego hacer otros dos por debajo de los 5’/km y en progresión. Una vez cumplido, otros 2 kms para volver a la calma y a la Vespa.
Y aquí empieza el segundo capítulo del entreno de Murphy. Tengo 4 opciones:
·         llamar a un amigo vespista que vive por allí y pedirle que me lleve las     llaves para cambiar el neumatico ;
·         llamar a la grua de Línea Directa ya que el seguro incluye la recuperación del vehiculo en caso de averia aunque nunca lo he hecho a pesar de las decenas de pinchazos sufridos en 30 años que voy en Vespa
·         dejar allí la Vespa, ir a casa con el trasporte público y volver más tarde o mañana a buscarla
·         pedir en tiendas/talleres de los alrededores si alguien tiene una llave del 13.
Abro la guantera y tacháaaaaan, me he dejado la BB en casa … jolín … y ya que la tercera opción no me gusta mucho, a por la cuarta . Voy pidiendo en varios sitios pero el único taller mecánico de la zona está cerrado así que me meto a buscar una ferretería y ya tengo claro que tendré que comprarme una llave nueva (suerte que me he llevado la tarjeta). Voy andando por el barrio, en pantalón corto y con unos pelacos en las piernas que ni Chewbacca, y con la cara puro estilo Red Runners. Por este barrio noto que se vende mucho pan, mucha ropa, muchos chuches, mucho zapatos pero nada de herramientas. Voy a por un chino, lo encuentro, pido llaves, herramientas, las tías ni idea, luego me dicen que ya no tienen o finalmente que quizás algo ha quedado. Me sacan una caja con decenas de llaves 16-18 y 20-22. Nada de 13 pero al final sale del fondo de la caja un juego completo, por 8,50€. Mío!!!!

Vuelvo a la Vespa, la medio tumbo contra un banco, y en el medio del paseo de la Avenida 11 Septiembre, me pongo a cambiar el neumático mientras decenas de personas, en la mayoría hombres de todas las edades, me miran con caras asombradas. Encima estoy a lado de una filial de MailBoxes y no paran de pasar a mi lado con transpallet cargando camiones y furgonetas.
Tras una media horita de trabajo ya está la Vespa con su ruedita nueva y justo cuando la vuelvo a poner encima del caballete los 3 pavos que trabajan en MailBoxes me preguntan – uno tras el otro – habías pinchado, eh? Es que tenemos mucho trabajo que si no te echaba una mano. Ya, si , seguro, chato. Como si no les hubiera visto fumarse unos pitillos con cada chofer de cada furgoneta. Por lo hablar de los transeúntes. Hasta un yayo soltó : “mira tu, y es una tía!” y 3 chavales de estos con 3 piercing en la cara pasaron mirándome con los ojos fuera de las orbitas.
Naturalmente una vez devuelto la Vespa a su posición habitual y a pesar de haber cerrado el grifo antes de tumbarla, he tenido que insistir unos 10 minutos buenos antes de que arrancara, ya que a estas viejunas le viene el ahogo fácil 
Pues nada, así acaba mi entreno y a pesar de tener previsto estar en casa como máximo en dos horas, he tardado 3 y media, y solo una de ellas ha resultado ser de entreno. Pero tenemos un nuevo juego de llaves para la Vespa o para lo que sea.
Casi no me da tiempo ir a quitarme los pelacos .

PS : por cierto, este domingo, en plan lúdico-competitivo vuelvo a "competir" .... maratón por relevos . no miréis el tiempo estimado, que los colegas siempre van de cachondeo. Preveo unos 34'30" cómo mínimo.